MadreSelva soy yo, Carmiña. Me llaman MadreSelva porque soy la mamá de Selva, mi hija mayor y también soy la mamá de Tian, mi pequeño Cielo. Crecí en la ciudad y vivo en el campo desde hace varios años. Soy arquitecta de profesión ; creadora y constructora de corazón.



Mi mamá me enseñó a coser y tejer a los siete años y desde entonces siempre tengo una aguja cerca. Vivo agradecida con ella por ese saber milenario que supo transmitirme con pasión y amor. Ahora es mi turno de transmitirlo así mismo a Selva.



Desde pequeña y gracias a mi abuela materna, entendí lo maravilloso y misterioso del mundo de las plantas, ella me acercó a la ruda, a la manzanilla, al jardín… que se convirtió en mi espacio de meditación activa y de « desconexión » de la vida urbana… entonces empecé a escuchar el llamado de las plantas medicinales y de la Tierra.

Ahora siento ese conocimiento intuitivo empoderarse cada vez más, ese linaje retoma fuerza y con la ayuda de varios abuelos y abuelas, aprendo todos los días y entiendo mejor la tarea.



También diseño y construyo junto con Vincent (mi ♥ ) casas y espacios ecológicos, donde los materiales y el uso son coherentes con la naturaleza y sus habitantes. Construir, preparar o fabricar cualquier cosa que no sea amorosa con la naturaleza dejó (desde hace tiempo) de hacer parte de nuestros planes.



Me considero una hija de la Tierra, responsable de su cuidado. Ahora en mi vida es importante danzarle al agua, rezarle al fuego, honrar la tierra, cantar al aire y celebrar la familia, el sol y la luna. Así estoy criando a mis hijos, así soy una mujer más feliz.

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Gracias mamá, gracias abuelita, gracias hija. MadreSelva somos todas !



 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Ps. Unos meses después de escribir el anterior texto, en el 2012, mientras celebrabamos el día de la Tierra y sembrábamos una querida placenta, Isabel mi abuela materna, murió. Gracias Gran Madre por bendecirnos con su amor y celebrar su partida cantandole a la Vida.